En el fútbol se han probado todo tipo de tácticas, todas ellas con un objetivo claro: lograr que un equipo logre la victoria sorprendiendo y desbordando al rival. Desde que se inventó este deporte las posiciones de los jugadores de fútbol 11 han ido cambiando, algunas de ellas con más fortuna que otras.
La única posición que no ha cambiado lo ha hecho por motivos evidentes. Y es que a nadie se le ocurriría dejar la portería sin alguien que la cubra. Pero por lo demás, las formaciones pueden ser tan simples o complejas como se le ocurra a un entrenador. Y lo mismo se puede decir que los estilos con los que juega un equipo, que a menudo definen las preferencias de un entrenador o Incluso el talento que tienen algunos de los jugadores.
Tácticas defensivas
Algunos de los mejores equipos de la historia han destacado por ser muy defensivos. Nadie se olvida de cómo jugaba ese Milan de finales de los 80, que en cuatro años consiguió un gran número de títulos y se colocó por méritos propios entre los clubes más destacados.
Algo que hizo diferente a este equipo en manos de Arrigo Sacchi, y que supuso un cambio en la forma de jugar de los italianos fu dejar de lado el catenaccio y hacer una defensa mucho más activa, apoyada en el juego de equipo. Por los resultados que logró, es evidente que este estilo de juego le funcionó muy bien.
Pero hay una gran cantidad de tácticas defensivas que se utilizan en la actualidad. Las más habituales en el fútbol 11 moderno son las siguientes:
Pressing y presión alta
Esta técnica consiste en no esperar al rival atrás, sino avanzar para presionar en la parte alta de la línea defensiva, sobre todo a quien lleva el balón. Esta presión se hace de forma grupal y aumenta las posibilidades de que el contrario cometa un error por los nervios a los que se ve sometido.
El pressing es una táctica de acoso bastante efectiva, y al hacerse lejos de la portería hay más posibilidades de reaccionar si el rival logra superar la línea.
Defensa en zona
La defensa zonal no se centra en un solo jugador, sino que cubre un espacio concreto de cualquier internada. Los defensas no suelen salir de esa área, sino que esperan con paciencia a que alguien se atreva a cruzar la línea imaginaria que delimita la zona.
Este estilo de defensas en el fútbol tiene como ventaja principal que siempre hay un defensa atento por si el rival quiere abrir hueco, aunque es vulnerable a los ataques en los que entra más de un jugador por esa zona.
Repliegue
El repliegue es una reacción cuando se pierde de pronto el control del juego. Al llegar el balón a los pies del contrario, casi todos los jugadores bajan hacia su zona con la intención de recuperarlo o al menos bloquear el avance y que no lleguen a puerta.
Como norma general, al repliegue le sigue una estrategia de pressing, buscando siempre poner nervioso al contrario y provocando que cometa errores que le hagan perder el balón.
La táctica del autobús o Catenaccio
Criticado muchas veces porque algunos lo consideran “el antifuútbol”, el Catenaccio es una táctica defensiva en la que casi todo el mundo está atrás, salvo un par de jugadores que esperan un contragolpe en la parte superior del campo. Los italianos convirtieron esta técnica en una seña de identidad, y muchos equipos, incluida la selección de Italia, lo han utilizado con bastante éxito.
A esta táctica defensiva se la llama el autobús porque la sensación que tiene el equipo contrario es que hay uno de estos vehículos cruzado delante de la portería, haciendo muy difícil que lleguen para chutar.
Intercepción de pases
Interceptar un pase es cortar un balón que va de un rival a otro y romper la jugada ofensiva. Funciona mejor en los pases largos o por arriba, aunque también se puede interceptar la pelota en pases más cortos. El defensa necesita estar muy atento al juego y encontrar el momento justo en el que puede meter el pie para salir con el balón controlado y realizar un contragolpe
Tácticas ofensivas
Al igual que en defensa, existen una gran cantidad de técnicas de ataque, que consisten en mover el balón hasta la portería y rematar para alcanzar el gol. La ofensiva es muy importante porque a fin de cuentas, en el fútbol gana quien marca más goles, y eso no es posible si no se hacen ataques.
La ofensiva debe complementarse con una buena defensa, y los entrenadores buscan el modo de compaginar ambas tácticas con el fin de sorprender al rival y abrir huecos con la mayor frecuencia posible. En el fútbol 11 actual se ven técnicas ofensivas como estas
Romper el fuera de juego y balones al espacio
En esta táctica se aprovecha la defensa adelantada del contrario dando pases al área justo antes de que un compañero supere la línea. Al no estar en fuera de juego en el momento del pase, la internada es legal y además deja al portero frente a frente con el delantero que recibe el balón, lo que lo pone en una situación de indefensión bastante crítica.
Tener superioridad numérica aumenta las posibilidades de romper una posición, por lo que la técnica de dos contra uno es bastante efectiva. Esta consiste en avanzar con dos delanteros por una zona que defiende un solo jugador y desbordarlo, o “dejarlo sentado” como se suele decir de forma coloquial, mientras mira con impotencia cómo le dejan atrás.
Esta táctica es muy eficaz siempre y cuando las líneas defensivas estén abiertas, y solo durante el tiempo que tarde otro defensa en apoyar al compañero. Si se hace con velocidad, uno de los dos puede estar frente al portero y crear mucho peligro
Tácticas ofensivas
Al igual que en defensa, existen una gran cantidad de técnicas de ataque, que consisten en mover el balón hasta la portería y rematar para alcanzar el gol. La ofensiva es muy importante porque a fin de cuentas, en el fútbol gana quien marca más goles, y eso no es posible si no se hacen ataques.
La ofensiva debe complementarse con una buena defensa, y los entrenadores buscan el modo de compaginar ambas tácticas con el fin de sorprender al rival y abrir huecos con la mayor frecuencia posible. En el fútbol 11 actual se ven técnicas ofensivas como estas:
Cambio de juego
En esta táctica se utilizan mucho las bandas y se juega un poco al límite porque consiste en cruzar el balón de un lado a otro varias veces con el fin de descolocar a la defensa y encontrar espacio por el que entrar. Además, durante los pases el resto de jugadores pueden ir pensando en nuevos movimientos, y estar al tanto de los huecos por los que se pueden colar mientras el rival se recompone.
Romper el fuera de juego y balones al espacio
En esta táctica se aprovecha la defensa adelantada del contrario dando pases al área justo antes de que un compañero supere la línea. Al no estar en fuera de juego en el momento del pase, la internada es legal y además deja al portero frente a frente con el delantero que recibe el balón, lo que lo pone en una situación de indefensión bastante crítica.
Esta táctica es un tanto arriesgada porque puede que el pase se produzca después de romper la línea. Pero cuando se hace bien, el peligro para la portería rival es evidente.
Una variante de esta táctica es lanzar balones al espacio, con pases en largo por encima de la cabeza de los jugadores y llegar para controlarlo y chutar a gol.
Triangulaciones
Como su propio nombre indica, esta táctica consiste en hacer pases entre tres jugadores impidiendo que otros se hagan con el balón. Esta técnica puede ir variando de posición y dejar e incluir a otro jugador mientras se avanza hacia la línea de meta.
Para conseguir triangulaciones efectivas los jugadores deben ser rápidos y hábiles, sobre todo en los pases en corto. La idea es hacer que la defensa no sepa cuál será el próximo jugador que lo reciba, y mientras ir ganando terreno en el campo.
Balones largos
Tácticas ofensivas
Al igual que en defensa, existen una gran cantidad de técnicas de ataque, que consisten en mover el balón hasta la portería y rematar para alcanzar el gol. La ofensiva es muy importante porque a fin de cuentas, en el fútbol gana quien marca más goles, y eso no es posible si no se hacen ataques.
La ofensiva debe complementarse con una buena defensa, y los entrenadores buscan el modo de compaginar ambas tácticas con el fin de sorprender al rival y abrir huecos con la mayor frecuencia posible. En el fútbol 11 actual se ven técnicas ofensivas como estas:
Cambio de juego
En esta táctica se utilizan mucho las bandas y se juega un poco al límite porque consiste en cruzar el balón de un lado a otro varias veces con el fin de descolocar a la defensa y encontrar espacio por el que entrar. Además, durante los pases el resto de jugadores pueden ir pensando en nuevos movimientos, y estar al tanto de los huecos por los que se pueden colar mientras el rival se recompone.
Romper el fuera de juego y balones al espacio
En esta táctica se aprovecha la defensa adelantada del contrario dando pases al área justo antes de que un compañero supere la línea. Al no estar en fuera de juego en el momento del pase, la internada es legal y además deja al portero frente a frente con el delantero que recibe el balón, lo que lo pone en una situación de indefensión bastante crítica.
Esta táctica es un tanto arriesgada porque puede que el pase se produzca después de romper la línea. Pero cuando se hace bien, el peligro para la portería rival es evidente.
Una variante de esta táctica es lanzar balones al espacio, con pases en largo por encima de la cabeza de los jugadores y llegar para controlarlo y chutar a gol.
Triangulaciones
Como su propio nombre indica, esta táctica consiste en hacer pases entre tres jugadores impidiendo que otros se hagan con el balón. Esta técnica puede ir variando de posición y dejar e incluir a otro jugador mientras se avanza hacia la línea de meta.
Para conseguir triangulaciones efectivas los jugadores deben ser rápidos y hábiles, sobre todo en los pases en corto. La idea es hacer que la defensa no sepa cuál será el próximo jugador que lo reciba, y mientras ir ganando terreno en el campo.
Mejorar el planeta entre todos El cambio climático y la pérdida de biodiversidad son dos de los mayores desafíos ambientales que enfrenta nuestro planeta en la actualidad. Una estrategia efectiva para abordar estos problemas es aumentar la cantidad de áreas verdes y mejorar la salud de los ecosistemas urbanos a través de la reforestación. Este proyecto propone la creación de un programa de reforestación urbana como una medida concreta para mejorar la calidad del aire, mitigar el cambio climático, promover la biodiversidad y mejorar la calidad de vida de las comunidades urbanas. Objetivos para cambiar el planeta: Reforestar áreas urbanas degradadas o subutilizadas para aumentar la cobertura vegetal y mejorar la calidad del medio ambiente. Fomentar la participación comunitaria y la conciencia ambiental a través de actividades de plantación y mantenimiento de árboles. Contribuir a la mitigación del cambio climático mediante la captura de carbono y la reducción de la temperatura urban...
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